Nikki Haley ha confirmado que votará por Donald Trump en las elecciones presidenciales de 2024, instando al presunto candidato de su partido a llegar a los votantes republicanos moderados que la respaldaron en la carrera primaria.
La exgobernadora de Carolina del Sur, que abandonó la carrera presidencial republicana en marzo, rompió su silencio después de semanas de especulación, dando un respaldo calificado a Trump y criticando la política exterior del presidente Biden como “una catástrofe”.
“Votaré por Trump”, dijo Haley durante un evento en el Instituto Hudson en Washington. “Como votante, pongo mis prioridades en un presidente que va a respaldar a nuestros aliados y responsabilizar a nuestros enemigos. ¿Quién aseguraría la frontera?
“Trump no ha sido perfecto en estas políticas. Lo dejé claro muchas, muchas veces. Pero Biden ha sido una catástrofe”.
Haley dejó claro que siente que Trump no ha hecho lo suficiente para ganarse los votos de los republicanos moderados y los votantes independientes que la apoyaron en la primaria y que han seguido votando por ella mucho después de que ella terminara su campaña.
“Trump sería inteligente al llegar a los millones de personas que votaron por mí y continúan apoyándome, y no asumir que simplemente estarán con él, y realmente espero que lo haga”, dijo.
Sus comentarios podrían proporcionar un impulso significativo a la candidatura de Trump para retomar la Casa Blanca. Haley, que se desempeñó como embajadora de Estados Unidos ante la ONU durante su presidencia, evitó enfáticamente respaldar a su exjefe cuando se retiró de la carrera.
A pesar de haber abandonado hace semanas, ella ha seguido ganando hasta el 20 por ciento de los votos en las primarias estatales. Su apoyo duradero ha expuesto una debilidad crítica para Trump, ya que los republicanos moderados e independientes continúan votando en contra del presunto candidato, que ahora se postula sin oposición.
Después de un comienzo tímido, Haley chocó frecuentemente con Trump en las últimas semanas de su campaña. Dijo que un segundo mandato de Trump sería “suicidio para nuestro país” y cuestionó su aptitud mental para la presidencia, burlándose de su “momento de anciano” cuando la confundió con la ex presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi. Trump estaba furioso, llamándola “cabeza de pájaro” y “una broma”.
A pesar de esos amargos intercambios, el respaldo de Haley se ha considerado crucial para que Trump recupere a sus seguidores antes del día de las elecciones en noviembre. Su influencia sobre los republicanos que siguen desconfiando del ex presidente ha generado especulaciones de que él podría ofrecerle el codiciado puesto de compañera de fórmula como vicepresidenta.
Trump desestimó esos rumores a principios de este mes, declarando en su plataforma Truth Social: “¡Nikki Haley no está siendo considerada para el puesto de vicepresidenta, pero le deseo lo mejor!”
La campaña de Biden ha lanzado su propia ofensiva publicitaria en un intento de persuadir a los seguidores de Haley para que voten por los demócratas en noviembre. Un anuncio lanzado por el equipo del presidente muestra clips de Trump atacando a Haley en mítines de campaña y sugiriendo que no necesita a sus seguidores para ganar.
“Si votaste por Nikki Haley, Donald Trump no quiere tu voto”, dice el anuncio. “Salva a Estados Unidos. Únete a nosotros”.