Quizás el momento más llamativo del debate televisivo de anoche fue la afirmación de Rishi Sunak de que un gobierno laborista costaría a cada familia en Gran Bretaña £2,000 en impuestos adicionales para pagar el “agujero negro” en sus planes de gobierno. Sir Keir Starmer describió la afirmación como “basura”.
Como siempre, la verdad está en algún punto intermedio.
El número citado por Sunak proviene de un “dossier” publicado por el partido el mes pasado. Intentó “calcular” todos los compromisos políticos de Starmer hasta la fecha y luego los comparó con su evaluación de los planes de Labour para pagar por ellos.
No sorprendentemente, concluyó que los planes de Labour costarían más de lo que el partido afirmaba, mientras que sus propuestas de aumento de impuestos generarían menos de lo que Labour afirmaba.
En general, concluyó que,